La meditación Gassho es un ejercicio para calmar tu mente, relajarte, concentrarte y conectarte con la energía universal. Nos permite entrar en el estado de paz que necesitamos para vincularnos con el poder del universo.
Meditar es una de las formas más efectivas de tranquilizarnos, con ella logramos tener paz en momentos turbulentos. No importa la circunstancia por la que estemos pasando, LA MEDITACIÓN ES NUESTRO MEJOR ALIADO, capaz de calmarnos en los peores momentos.
OSHO dijo: “La meditación es el proceso simple de observar tu propia mente. No hay que luchar con ella, ni tampoco se trata de controlarla. Solo hay que permanecer ahí, como un testigo que no elige.”
Debes practicarla para conocerte a través del silencio. Simplemente limítate a observar para encontrarte con tu Ser divino.
¿Cómo practicar la meditación Gassho de forma correcta?
- Siéntate con los ojos cerrados y la cabeza estirada (como si un hilo invisible te conectara con el cielo).
- Los hombros estarán paralelos a las rodillas.
- Sitúa tus manos unidas como en oración frente al corazón (en el cuarto chakra)
- Visualiza, imagina o siente como cada vez que respires recibes la energía a través de la punta de los dedos corazón.
- Respira lentamente, concéntrate profundamente en la respiración.
- Si te das cuenta que estás pensando mientras meditas (no pasa nada eso forma parte del proceso de meditación) no luches con ellos, simplemente obsérvalos, DI GRACIAS, y vuelves a centrar tu atención en tus dedos corazón.
- Agradece la energía recibida.
Haciendo con frecuencia la meditación Gassho, lograrás conservar un bienestar interno extraordinario, tendrás una visión renovada hacia la vida. Aprenderás a tener una buena actitud frente a los problemas. Te hará pensar de otra forma las cosas.
Lo recomendable es hacerla durante 5 minutos una o 2 veces al día, por ejemplo, al despertarte y antes de irte a dormir. Tú decides en qué momento lo practicarás, lo importante es que lo hagas parte de tu rutina.
Por cierto, un pequeño detalle para que sepas más sobre el tema. Gassho significa palmas de las manos juntas. Una historia dice que después de un encuentro entre Mahatma Gandhi y Albert Einstein, el científico le preguntó a Gandhi cuál es el significado de este gesto que en otras tradiciones budistas se llama Namasté.
Gandhi respondió de la siguiente manera:
“Honro el lugar en ti, en el cual se encuentra todo el universo».
«Honro el lugar de la luz, del amor, de la verdad, de la paz y de la sabiduría que se encuentra en ti».
«Honro el lugar en ti, donde, cuando tú y yo estamos ahí, nosotros ambos somos solo uno».
Gassho es un gesto de respeto hacia los demás y hacia todas las existencias. Dirige el espíritu por encima del ego y de las consideraciones personales.
Gassho crea armonía entre los seres, por muy diferentes que sean.
Cuando la acción es la justa, el mundo se vuelve justo.
Cuando hacemos sinceramente Gassho por los demás, se crea una mutua simpatía.
Si lo hacemos por el universo entero, incluso los árboles, las montañas y los ríos sienten esta simpatía y nos la devuelven a su vez.
Las manos juntas en Gassho hacen realidad la unidad entre el ego y el cosmos, entre lo material y lo espiritual.
